Última actualización: 3 de septiembre de 2024 @ 11:40 am
Las personas inmunosuprimidas (de cualquier edad) deben recibir 3 dosis separadas por un mes como esquema primario. Lo mismo las personas mayores de 50 años que hubieran recibido Sinopharm como primera y segunda dosis. Luego, recibir los refuerzos correspondientes.
La Dirección de Control de Enfermedades Inmunoprevenibles del Ministerio de Salud de la Nación ha presentado un informe sobre Intercambiabilidad de vacunas COVID-19 en nuestro país. Se puede ver haciendo clic aquí.
Sí, la vacunación contra la COVID-19 está indicada en personas inmunosuprimidas. De cualquier forma, siempre es importante hacer una consulta médica previa.
Con el paso del tiempo disminuye la protección para evitar casos leves y moderados, especialmente en ciertas poblaciones, por eso son necesarias las dosis de refuerzo según corresponda.
Según la información disponible, las vacunas utilizadas en Argentina siguen ofreciendo protección contra la enfermedad grave, las hospitalizaciones y la muerte provocadas por las variantes conocidas en circulación. Pueden no ser tan efectivas para prevenir la infección por estas variantes.
Actualmente, están llegando al país vacunas bivariantes, con plataforma de ARN mensajero, que protegen tanto de la cepa original del SARS-CoV-2 (de Wuhan, China) como de la variante Ómicron BA4-BA5.
Pueden aplicarse juntas el mismo día que es lo recomendado para evitar oportunidades perdidas.
Si tuviste COVID, deben haber pasado 10 días desde el alta médica.
Sin embargo, el riesgo de que esto suceda es extremadamente bajo (0,0004% con la vacuna de AstraZeneca y 0.0008% con la vacuna de Jannsen) y muchísimo menor al riesgo de presentar trombosis asociado al uso de anticonceptivos orales (0,05%), a un viaje en avión (0,1%) o a la infección por COVID-19 (7,8-23%).
De esta forma, los beneficios de la vacunación contra el coronavirus superan cualquier riesgo de efecto secundario, y así fue anunciado por la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) para las vacunas de AstraZeneca y Janssen.
En la Argentina, en función de la evidencia actual, la Comisión Nacional de Seguridad en Vacunas (CoNaSeVa) recomendó continuar con la aplicación de la vacuna de AstraZeneca/Covishield. “Como todo fármaco, las vacunas no están exentas de efectos adversos, sin embargo, es mayor el beneficio sobre el riesgo”, concluyó la CoNaSeva.
No. Todas las vacunas que se aplican en Argentina carecen de capacidad replicativa del virus por lo que no generan ningún riesgo de desarrollar la enfermedad. En el caso de presentar síntomas compatibles con COVID-19 con PCR positiva, existen múltiples posibilidades (en orden decreciente de probabilidad):
- Personas que fueron vacunadas inadvertidamente durante el período de incubación de la enfermedad.
- Personas que se infectaron pocos días post-vacunación, ya que la respuesta del sistema inmune demora hasta 28 días, y si bien se conoce su protección frente a la enfermedad, aún se desconoce su posible efecto protector sobre la infección.
- Personas que se enfermaron a pesar del efecto protector de la vacuna, ya que las mismas no ofrecen una protección del 100%
No hay evidencia que sugiera preocupaciones sobre el efecto de las vacunas sobre la fertilidad. Las afirmaciones que asocian las vacunas COVID-19 con cambios en la integridad de los órganos reproductivos son especulativas y no están respaldadas por datos científicos.
Diversos trabajos han demostrado alteraciones en el ciclo menstrual (tiempo y cantidad del sangrado) tanto por la infección como por las vacunas contra Covid.
Esta alteración es transitoria, dura unos pocos ciclos, y luego tiende a normalizarse.